El proceso de ducha nasal es sencillo:
Prepare la solución: comience mezclando una solución salina. Esto se puede hacer disolviendo una cucharadita de sal en una taza de agua destilada tibia. Opcionalmente, puedes agregar una pizca de bicarbonato de sodio para ayudar a calmar las fosas nasales.
Colóquese: párese sobre un lavabo o en la ducha e incline la cabeza ligeramente hacia adelante. Mantenga la boca abierta para respirar por la boca durante el procedimiento.
Utilice un kit de enjuague nasal: Los kits de enjuague nasal están ampliamente disponibles y vienen con una botella exprimible o un recipiente Neti especialmente diseñado para facilitar la administración de la solución salina.
Enjuague las fosas nasales: vierta suavemente la solución salina en una fosa nasal mientras mantiene la otra fosa nasal cerrada. La solución fluirá a través de sus fosas nasales y saldrá por la otra fosa nasal o por la boca. Repita en el otro lado.
Complete el proceso: Después de usar la solución salina, suénese la nariz suavemente para eliminar cualquier resto de solución y moco. Deseche cualquier solución no utilizada y limpie el kit de enjuague.
Existen varios métodos para realizar duchas nasales:
Neti Pot: Una opción tradicional, el neti pot es un recipiente pequeño con un pico que le permite verter solución salina en una fosa nasal y hacer que salga por la otra. Es fundamental utilizar agua esterilizada y limpiar adecuadamente la olla.
Botella exprimible nasal: Los kits de enjuague nasal con botellas exprimibles son fáciles de usar y controlar, lo que los convierte en una opción popular para muchos. A menudo vienen con paquetes de solución salina premezclada para mayor comodidad.
Aerosol nasal: Los aerosoles nasales con solución salina están disponibles sin receta y ofrecen una forma rápida y conveniente de enjuagar las fosas nasales. Son adecuados para uso en movimiento.